A un año del temporal


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La crisis, por naturaleza, es un fenómeno difícil de ser abarcado, puesto que la percepción del hecho es compleja en el entorno social de cualquier organización. Nuestro temporal por ende, constituyó un hecho contundente no sólo para la dinámica de la institución sino para toda la comunidad. Trastocó nuestras vidas, nuestras historias familiares y la propia historia e imagen de nuestra Cooperativa que brinda servicios públicos esenciales a sus asociados. La gran labor de sus integrantes demostró que el espíritu y la fuerza de nuestros pioneros siguen perdurando a pesar del tiempo.

Nuestro temporal significó una gran crisis, pero una crisis social y económica global, donde nuestra entidad, como tantas otras, se vio inmersa, afectada y dañada. No significó una crisis propia, sino compartida, en la que toda la trama social se vio involucrada. Una crisis que tocó nuestro corazón, que dejó un aprendizaje, una manera de ser y convivir como sociedad. Una crisis que no sólo se llevó lo material, sino la construcción de sentido respecto de “eso” material, las vivencias conjuntas, las vivencias en familia, las vivencias personales, que no tienen un valor económico.

Este desastre natural, sorpresivo, intenso, extenso y desestabilizador, escapó a cualquier planificación  y pronóstico. Estaba pasando algo grave y había que dar respuesta de forma urgente. Porque eran servicios básicos los que estaban en juego y detrás de ellos las personas. Esta no era una crisis de funciones, ni de proyecto, ni de modelo, esto era un desastre natural que atravesó a toda la comunidad y vulneró todos los sistemas de tal forma que no se sabía bien qué era lo que estaba pasando y cómo se iba a solucionar. Había una gran incertidumbre.

Si de rasgos o características de crisis hablamos,  en esta crisis que podemos llamar “desastre” o “catástrofe”, estuvo presente el factor sorpresa: fue no evitable y alteró el curso de manera radical. Si bien se anunciaban las medidas preventivas ante lo que parecía una fuerte lluvia, el temporal sorprendió a la comunidad por su magnitud impensada, su fuerza imponente, el gran daño que provocó, tanto emocional  como material.

Esta catástrofe con estas causas y con las consecuencias que hoy todavía sufrimos, son y serán únicas. Un temporal  que puso a prueba nuestra propia vida en sociedad, el que obligó a redefinir su significación, su construcción de ciudadanía, el rol de los medios de comunicación, de las redes sociales, de las instituciones y el propio estado. El que obligó a unirse, a trabajar en equipo y a caminar el mismo camino.

Otro rasgo, fue el sentido de urgencia. Eran muchos los frentes que había que atacar y muchas informaciones negativas que comunicar, es decir que el tiempo en la gestión de la información y resolución fue una variable fundamental. Un temporal, al que siguió otro temporal y allí el desastre general de nuestros servicios. Allí, nuestra Cooperativa, puesta al servicio del socio, cómo se podía, con la verdad y el trabajo continuo, y con los medios con que se contaba.

A medida que pasaban las horas, era más la información que disponíamos acerca del daño en las redes de agua, cloacas y de energía que el desastre que había dejado o estaba dejando, en una comunidad que atravesaba horas de angustia, incertidumbre y desesperación, ante un hecho sin precedentes en la ciudad.

Si teníamos algo en claro, en medio de esa catástrofe, era que teníamos que actuar rápido para reponer los servicios, y eso fue lo que hicimos.

Algunas cifras que dejó el temporal

La contingencia climática generó un gran perjuicio económico a nuestra entidad. La erogación de gastos de carácter extraordinario afectó a todas las áreas operativas. El gasto total por insumos y servicio contratados para dar pronta respuesta fue de $ 31.078.134. Los gastos en horas extras, dado el personal afectado a reponer los servicios, fue de $ 36.250.877.

Respecto al Servicio Eléctrico, más de 20.000 usuarios estuvieron afectados por cortes de energía, a los cuales se les repuso el servicio en menos de 24 horas. Muy pocas zonas, como los barrios Los Arenales, Médanos y Caleta Córdova, por la gravedad del daño, no contaron con el servicio eléctrico entre 3 y 5 días.

Respecto al Servicio de Saneamiento, sólo en el barrio Laprida, uno de los más castigados por el temporal, se instalaron 600 metros de red cloacal nueva y 730 metros de red de agua nueva, y se realizaron más de 90 conexiones de agua.
Por ejemplo, en la Avenida Fray Luis Beltrán se instaló un colector de descarga en PVC Ø 500mm en una longitud aproximada de 2.240 metros, desde la rotonda de barrios Saavedra y Laprida hasta Avenida Fray Luis Beltrán y calle Santa Lucía, con 30 bocas de registro, y 1000 metros hasta la intesección  con calle Juan Pedernera, con 12 bocas de registro.

Respecto al Sistema Acueductos, más de 20 tramos principales y subacueductos de grandes diámetros, fueron dañados.

Se enviaron más de 200 informes/comunicados del estado de los servicios durante el temporal y los meses posteriores. El último informe, como tal,  se envió el 29 de agosto cuando toda la ciudad contaba con agua de forma permanente.

Un dato relevante para destacar fue la cantidad de visitas en el sitio web institucional, que se transformó en la herramienta con la información oficial. Desde el 29 de marzo hasta el 29 de junio, es decir 3 meses (cuando aún continuaban enviándose informes) el sitio tuvo 67.000 visitas, es decir 4.450% más respecto a los 3 meses previos, con 30.000 usuarios nuevos, es decir un 2.425 % respecto al mismo período de tiempo.

Respecto al Centro de Atención de Servicios al Asociado (CASA) debió sumar personal adicional para cubrir, en la medida de lo posible, la demanda de la comunidad. Algunas cifras que pudieron contabilizarse:
-    Llamados atendidos: 16.056 (cantidad que habitualmente se atiende en 30 días).
-    Llamados perdidos: 15.532 (cantidad que habitualmente se pierde en 200 días).
-    Reclamos generados: 3.063 por todos los servicios (sin tener en cuenta los reclamos tomados de manera personalizada en la Guardia de la entidad, no cargados al sistema).

El esfuerzo propio y la ayuda mutua. La labor del personal


Se trabajó incansablemente y, sin proponérnoslo, la entidad tomó un protagonismo, naturalmente necesario, no sólo por su condición de prestadora de servicios públicos, sino por la tarea llevada a cabo. En esta crisis no hubo silencios, ni acusaciones, ni individualidades, ni justificaciones como puede pasar en otras crisis. Hubo trabajo en equipo, comité de crisis que se formó para resolver los inconvenientes, responsabilidades compartidas, vivencias emotivas, transparencia y honestidad en la información brindada. Hubo trabajo, coordinación y colaboración, esfuerzo y solidaridad, y estas cualidades fueron sentidas por la comunidad, fueron apropiadas, formándose una imagen quizá diferente, quizá positiva de una entidad cooperativa, más allá del sentido de pertenencia o identificación. Hubo, después de mucho tiempo, una valoración de la entidad en relación al trabajo y esfuerzo de su personal. Una construcción de sentido que quedará en la memoria colectiva, más allá de los nombres.

CONSEJOS ÚTILES

  • Consejo Nº1

    Al lavarte los dientes cerrá la canilla para ahorrar agua

  • Consejo Nº2

    Al fregar los platos y/o utensilios de cocina no dejar correr el agua

  • Consejo Nº3

    Controlar si hay pérdidas en los sistemas sanitarios de su hogar

  • Consejo Nº4

    Si lavás tu auto en casa utilizá un balde para economizar agua

  • Consejo Nº5

    Utilizá el lavarropas en su máxima capacidad, evitando el exceso de jabón y productos no biodegradables

DATOS IMPORTANTES

Acerca del cuidado del agua

El cuidado del agua es responsabilidad de todos. Restemos derroche y sumemos ahorro